1/7/09

Cap 11 (1)

* Esto más que un capitulo, es como una especie de relato vinculado a la historia, un pequeño pasaje que aporta cierta luz a un suceso del jardín. Espero que os guste.




Una historia jamás contada: Ajusticiamiento



LA CLARIDAD DE LOS NECIOS




¿Cómo sopesar una acción, tratando de ser consciente de sus consecuencias, cuando se alberga a tus ojos una oportunidad tan clara de éxito?


Súlian de Edar



Pese a sentir en sus orondas carnes el cansancio acumulado por supervisar todos y cada uno de los preparativos, fue arrancado de una agradable lasitud próxima al sueño por los gritos y lamentos de un varón. Y tras concederse uno de los breves instantes que solían serle necesarios para recuperar la quietud, miró al joven que compartía su lecho en calidad de presente, mas no halló respuesta en él, gozaba de un profundo sueño. Durante este intervalo permaneció en silencio, envuelto por la desapacible negrura que la noche trae consigo y ansioso por desvelar el origen de lamentos que con la misma certidumbre podría haber traído el viento o formar parte del nutrido devenir de pesadillas con tendencia a abordarlo. Mas escasa fue la incertidumbre recolectada en tan corta espera, puesto que un nuevo lamento proveniente del jardín disipó toda duda. Un jardín que sin el amparo de la luz había permanecido mudo hasta ese día. Aún aguardándolo tras la primera escucha un escalofrió recorrió su cuerpo, mas toda intranquilidad se vio eclipsada por su necesidad de saber. Desde aquel momento sus ojos se tornaron centinelas, fijos en la ventana por la que irrumpió tan acusado penar. Y pese a saber que asomarse a horas tan intempestivas se consideraba una falta grave, no veía el modo de evitarlo. Aquel irrefrenable deseo devoraba con avidez sensatez y temor.

2 comentarios:

dafd dijo...

Claro, lógico este capítulo.

Ángel Vela dijo...

La verdad es que me pareció muy interesante, y es algo que se repite en algunas partes de la novela.

Ya me diras que te parece cuando termine ;)

Un abrazo. Nos leemos.